En el Colegio Carmelitas de Elda, la innovación educativa:
- Se realiza para mejorar las actividades que habitualmente se realizan en el centro.
- Se lleva a cabo para adaptarse a una situación de cambio.
- Se hace para hacer algo que antes no era posible realizar.
- Se desarrolla para captar más alumnos.
- Se realiza para ofertar un buen y completo servicio a las familias.
- Se lleva a cabo para reducir el esfuerzo de los alumnos.
También afirmó D. Rafael que, antes que maestros somos personas. Por tanto, si somos buenas personas, seremos buenos maestros.
Siguiendo con la conferencia, el ponente nos pidió que definiéramos centro educativo, ya que la innovación de la que hemos hablado anteriormente se realizará en este lugar, por lo que es conveniente aclarar el término. Centro educativo es el sitio en el que hay profesores, alumnos y en el que se establece un proceso de enseñanza-aprendizaje.
Por otro lado, el director del Colegio Carmelitas de Elda, afirmó que el marketing es una gran ayuda en un centro educativo. También dijo que es necesario crear un producto en nuestro centro a gusto de los clientes. Un aspecto que nos llamó bastante la atención es que el ponente hablaba de “clientes” para referirse a: alumnos, padres, profesorado, PAS (personal de administración y servicios), empresas proveedoras, entidad propietaria.
Según palabras de D. Rafael, actualmente, el cliente ha cambiado, por lo que la enseñanza también ha tenido que cambiar. En este contexto, la escuela debe enseñar a comer, higiene básica, detectar problemas de salud, actividades extraescolares, campaña de vacunación, crear hábitos, fomentar conductas saludables, etc. Es importante innovar y saber cómo lo tenemos que hacer, ya que dependiendo de nuestra mejora, en cierto modo, el alumno podrá cambiar o no.
En mi opinión, me gustaría destacar que estoy de acuerdo con el ponente en cuanto a la especial importancia que le otorga a la formación continua del profesorado, requisito que deberían cumplir todos los docentes. Sin embargo, no me parece oportuno que se haga referencia a padres y alumnos como “clientes”. Pienso que las personas que acuden a comprar a cualquier tienda sí que son clientes de ese establecimiento, pero los sujetos que van a un colegio son alumnos y padres de alumnos. Parece un aspecto insignificante, pero, el simple hecho de utilizar un término u otro ofrece una mayor o menor cercanía de los maestros con los alumnos. La relación entre el profesor y el estudiante debe ser cercana y de confianza; si se le llama cliente al alumnado, esta relación parece percibirse de otra manera más distante.
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